La autoestima es muy importante para que una persona pueda tomar decisiones acertadas y pueda sentir felicidad con quién es y con las cosas que vive a su alrededor. Una persona puede ser bendecida con inteligencia y talento, pero si carece de autoestima, puede resultar un obstáculo para alcanzar el éxito en sus tareas, relaciones y de seguro en todas las áreas de la vida. Por eso es importante que los padres pongamos un gran esfuerzo en ayudar a nuestros hijos a desarrollar un buen concepto de ellos mismos. Los primeros años junto a ti, van a jugar un gran rol, en el desarrollo de su autoestima.
Aquí te comparto algunas formas en las que tú como madre o padre puedes ser parte importante de este desarrollo en tu hijo o hija.
1. Trabaja para mejorar tu propia autoestima: Somos seres humanos y todos vivimos experiencias. En nuestra propia infancia pudimos haber tenido momentos que lastimaron nuestra autoestima y quizás esos eventos no han sido sanados, por lo tanto, debemos buscar la forma de hacerlo. De igual forma, todas las experiencias que hemos tenido en el transcurso de nuestras vidas nos marcan. Por eso, lo primero es trabajar en nuestra propia autoestima para ayudar a nuestros pequeños a poder desarrollar una autoestima sana en ellos también.
2. Dile a tu hijo que lo amas: Repítele a tu hijo todos los días que lo amas, así mismo: TE AMO; cuando haga cosas que no estén bien, recuerda que lo amas igual, que siempre vas a estar allí para él o ella, y que lo amarás por siempre. Estas palabras son tan fuertes y llegan profundamente en su interior.
3. Demuéstrale afecto: Durante tus interacciones con tu hijo, demuéstrale afecto, abrázalo, dale caricias, sonríele, conversa con él, escúchalo. Estas interacciones tendrán un efecto profundo en él, que es digno de ser amado, y que le demuestren amor; y también él será, cuando sea adulto, capaz de demostrar amor por los demás y de recibir amor.
4. Felicítalo, dale elogios: Felicítalo por lo que hace, por la ayuda que da en casa, por todos sus logros, por mínimos que sean; hazlo sentir importante, sentir que tú estás muy orgulloso de ser su padre o su madre, y que sin él en tu vida, nada sería igual.
5. No compares a tu hijo con otros: Duele mucho escuchar comparaciones: entre hermanos u otros niños. A veces se nos escapan las comparaciones, pero son nocivas para la autoestima de un pequeño. Cuando vamos a corregirlos por algo, es mejor decir, que lo que está haciendo no está bien, pero que él es un niño bueno, y no traer a colación que otro niño lo hace de tal o cual forma. Tenemos que hacer sentir a nuestros hijos que son especiales y que no tienen comparación con nadie.
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